martes, 24 de junio de 2014

Piscina

Era un día de verano en 2010, estábamos mis amigos y yo en la piscina cuando un amigo propuso comprar unas botellas y hacer una fiesta. Yo nunca había bebido pero fui con ellos para no estar solo y ya no me acuerdo de nada mas. Hoy estamos en 2014 y acabo de levantarme del coma. 
He perdido 4 años de mi vida.


Valeriano Leiva Olmedo

Algo que atrapa


Quiso ahogar sus penas y sin saberlo,acabó ahogándose junto a ellas.

Salud Hermoso

sábado, 14 de junio de 2014

Deseos


Veo a una persona con ojos de deseo... pero esa mirada la dirige hacia una botella.

Cristina Rosell

Al otro lado

Aquel día vi como la vida de aquella chica se iba amarga y dolorosamente por culpa de su pareja, que la mató por estar atrapado en las garras del alcohol. Cuando pensó en lo que había hecho y en lo que se había convertido su vida por culpa de aquel vicio que no lo dejaba avanzar, se suicidó sin pensarlo. Y así creyó que al otro lado de la vida encontraría la paz infinita que nunca tuvo.

Nerea Sicilia

Sin sin sin

Sin mujer... sin hijos...sin familia...todo perdido...
Y, aun así, me importa más que no tenga una botella de Whisky.

Alicia Ruiz Gallardo

Al final los olvidó

Alberto, un niño de 16, vivía humildemente en un barrio donde los habitantes no tenían mucho dinero. Sus padres estaban en paro y no tenían ni para comer; el chico se dedicaba a robar para beber y olvidar los problemas.
Cada copa que tomaba se daba cuenta de que los problemas cada vez le importaban menos.
Hasta que una última copa acabo con su vida .

Maria del Mar Figeroa Muñoz

viernes, 13 de junio de 2014

Amarrado a esa botella

Amarrado a esa botella ...condenado a esa botella … mi cadena perpetua me condujo hasta aquel último trago con el que dejé este infierno y expiré a un lugar mejor....

Francisco Javier López

Abismo, su refugio

Trago a trago fue consumiendo su vida. Perdió lo más preciado...por culpa de ese falso amigo. Alejado de la realidad, solo, en un abismo en el que el alcohol acabó siendo su más particular refugio.

Juan Urbano Palenzuela

La última y nos vamos

La última y nos vamos,se dijo para sí mismo mientras todo desaparecía

Álvaro Ruiz Ramos

jueves, 12 de junio de 2014

Mensaje no enviado

- Hola, ¿cómo estás?
- Hola. ¿Estás bien? Escribes raro...
- Sí. Acabo de cenar y se me ha subido un poco el vino.
- Ah, descansa hasta que se te pase.
- Estoy en un semáforo en rojo.
- Pues para y deja de escribir. Estás borracho. No conduzcas así.

El airbag no saltó a tiempo, el accidente acabó con un solo muerto.
Al revisar los objetos personales del difunto encontraron un móvil con la pantalla encendida. En él ponía "no me va a pasar nada".

MªRemedios Rubio

Ritmo

Bebí para seguir el ritmo, el ritmo me llevó al descontrol.
La ambulancia hizo su trabajo.

Rodrigo Morales

La sábana

Nadie, ni siquiera el veterano comisario de policía, pudo comprender la carcajada de aquel hombre que estaba bajo los efectos del alcohol. La lanzó hacia la sábana que cubría el cuerpo de la que, hasta hacía unos minutos, había sido su mujer.

Alba Sánchez Gala

El impacto




Carretera oscura llena de agujeros profundos, el camino de vuelta a casa es difícil. La cabeza me da vueltas, empiezo a ver borroso, y a sentirme feliz y triste a la vez. De repente dejé de sentir todo, me veo a mí mismo, reflejado como un espejo.
Destrozado el cuerpo y el coche. Pero no siento nada, soy feliz.


Rafael Jiménez Ramos

Realidad difusa

¿Beber para ahogar en el alcohol tus llantos o beber por diversión?
Ambas pueden cambiar tu vida a bien o a mal; Marcos, un compañero, empezó a beber por dolor y acabó en diversión, ¡qué bueno es el alcohol cuando sabes controlarte! y ¡qué malo cuando al igual que a él, te hace adicto hasta el día que él mismo te causa el peor de tus días!


Adrián Torrecillas Jurado

Y algunos piensan...

Y algunos piensan que la mejor forma de evadirte de tus mayores problemas es el alcohol. Pero son egoístas, no piensan en los problemas que esta forma de evadirte de la realidad puede causarle a tus seres más queridos, tus padres, que te ven destruirte poco a poco y no saben que mas hacer para poder ayudarte a salir de ese mundo. Hasta que encuentras tu final feliz, ese final que todo el mundo ansía, el amor.


Rosa López García

sábado, 7 de junio de 2014

Amiga

De rodillas, apoyada en el filo de la bañera, con su botella muy cerquita, aturdida, y confundida. Y allí yo, en el marco de la puerta, observando aterrorizada a esa persona a la que llama amiga.
Yo estaba pensando en que el alcohol un día me la quitaría.


María Vílchez Romero

De la botella a la cama

Aquí estoy viendo mi cuerpo inerte en esa cama fría del hospital, con mis padres abrazados y llorando mi pérdida. Aquí estoy después de ese día por el cual yo no volveré a ser yo.


Estela Castillo.

jueves, 5 de junio de 2014

Los temores de ella

Ella temía que llegara la noche y él llegara a casa con unas copas de más, como todos los días. Decidió irse  porque no aguantaba más; hizo las maletas y se fue de casa. Cuando él llegó tenia un mensaje que decía que su mujer había tenido un accidente de coche y estaba muy grave, ahí fue cuando se dio cuenta de que la quería y no volvió a probar el alcohol.
Se me ha olvidado decirles que ella murió.


María Crespo.

ALMA PERDIDA



¿Madre? Bueno... no sé muy bien qué es tener una, apenas recuerdo a la mía... era tan pequeño, de mi padre, sin embargo, sí me acuerdo, al principio me encantaba estar con él. Era cariñoso, al menos conmigo, o eso creía yo... Mi padre nunca estaba en casa cuando yo llegaba de la escuela,siempre comía lo que podía hasta que él llegaba de trabajar; me daba un beso en la mejilla y se iba, nunca me decía a dónde , pero cuando yo ya estaba en la cama siempre lo oía entrar tropezando con todo, y lo vi tirado en la entrada con una botella debajo del brazo, casi vacía. Se levantó y me miró, con una de esas caras raras que tienen los papás que dan mucho miedo, yo nunca le había visto así...después de eso nunca más volví a ver a mi papá, veía todos los días a un hombre, y cada día mi pequeño cuerpo tenia un nuevo tatuaje, de esos que se van pero que te marcan para toda la vida. Cuando yo me marché tenía 10 años, ese hombre estaba en el baño, desmayado, me agaché, lo miré y le dije al oído: “papi, sé que estás ahí dentro, siento no saber cómo sacarte, …te quiero".



Noelia Luna Palomino