lunes, 22 de febrero de 2016

Como cada día...



Como cada día, Marta se emborracha en el bar de la esquina.
Como cada día, Marta se duerme pensando en el alcohol.
Como cada día, Marta se despierta pensando en el alcohol.
Como cada día, Marta ahoga sus problemas en su copa.
Como cada día, Marta adelanta la fecha de su muerte.


MªÁngeles Rosales

Sensaciones

Sensaciones, eso era lo que me producía el alcohol. Sensaciones distintas.
¿Algo bueno? No lo sé, pero eran adictivas.
El problema viene cuando esas sensaciones dejan de ser tuyas para tú a pasar a formar parte de esas sensaciones.
Sensaciones, que terminaron siendo dueñas de mi libertad.
Sensaciones, que terminaron siendo dueñas de mi vida.

Esteban Gómez

La discoteca


Aquella noche en la discoteca lo empezaba a ver todo borroso, empezaba a marearme, me costaba sostenerme en pie... Aquella noche bebí demasiado y os preguntaréis y ¿qué pasó después? Pues después no lo recuerdo del todo, pero empecé a oír las sirenas de las ambulancias y sentí como mi cabeza chocaba contra el suelo, ciertamente sé lo que pasó. Me quedé inconsciente y perdí la memoria, y pude sufrir un cólico por haber bebido demasiado. Hoy estoy en el hospital intentando salir del coma.

Alejandro García

Paseo junto al río

Era de noche, paseaban junto al río, entonces uno le dijo al otro:
-Pruébalo no te va pasar nada.
El otro no le hizo caso pero él bebió, un sorbo, un trago, toda la botella...
A la hora de volver a casa, conducía él, pero iba bebido. Tan solo una vez le pidió que fuera más despacio, que tenía miedo. Pero cuando iba a pedírselo por segunda vez aquel árbol en medio del bosque hizo que reinara el silencio para aquellos dos colegas que solo daban un paseo por el río en aquella noche.


Alejandro García

lunes, 8 de febrero de 2016

Pasado Pesado




Oigo un sonido extraño. Suena hueco, vacío, agobiante, insoportable,incluso doloroso. ¿Así ruge la soledad? Grita tan fuerte que me provoca jaqueca. ¿Será eso o el rompecabezas que tengo sobre los hombros? Sea lo que sea, ¡que pare ya!
El lazo que sucumbe mi corazón cada vez se hace más fuerte. No me deja respirar, me ahoga los pensamientos. Así es imposible  existir en el mundo de los vivos, de los que sienten... aunque pequen.



Pero la bestia se liberó, rompió la jaula con su última gota de odio.¿Y quién encerró allí a la mansa criatura? ¿Quién la maltrató? ¿Quién se encariñó con su dolor y su fatiga? Porque nunca nadie se lo preguntó.



Quiero ser. Quiero estar. Quiero volver a ser y a estar. Y quiero olvidar que la bestia que una vez fue y estuvo aún sobrevive en este desolado callejón sin salida.

Miriam Kapela

Carta de un amigo


 
Si quieres seguir, sigue
Si quieres hacer daño, sigue
Si quieres destruirte, sigue
Si quieres morir, sigue
Pero piensa que nos estás matando a los demás.

MªJosé López

Caso de David



Hola, soy David y tengo 45 años. Hace doce años, bebía en compañía de otros. Empecé a beber más por el estrés del trabajo y de la casa. Como el estrés era en cierta medida inevitable y normal, siempre encontraba la justificación de beber otra copa.

Una mañana me levanté sin recordar nada de la noche anterior, empecé a llamar a amigos por si los había ofendido, pero no. Ahí fue cundo sufrí mi primera amnesia alcohólica. A partir de ahí comencé a sufrirlas más frecuentemente. Como mis amigos no bebían a la misma velocidad que yo, comencé a beber en secreto. Tanto bebía, que me despidieron del trabajo, por ausencias y por ir borracho. 

Me di cuenta que tenía un problema con la bebida, así que la dejé durante varias semanas, pero volví a beber de nuevo con mayor ansia e intensidad.

Una noche tuve un accidente de coche y fui llevado al hospital. Al día siguiente reconocí que necesitaba ayuda para dejar la bebida.

Por eso, tened cuidado con el consumo del alcohol, infórmense, pregunten, no esperen que sea demasiado tarde, recuerden que la última copa puede ser su fin.



Marta Castillejo Sánchez