lunes, 8 de diciembre de 2014

Ellas


Ella, ella es bella, hermosa como las flores en primavera, ella sabe escuchar, ella sabe leerme sin usar la vista, aunque me haya dejado sin familia, sabe apreciarme cómo nadie lo hace, aunque ya no tenga amigos, sabe aconsejarme, aunque ya no pueda pensar en otra cosa, sabe cómo tratar con un incomprendido como yo, aunque cuando no la tengo me pongo violento con tal de volver a probarla, ella es perfecta, yo aún no le he encontrado un fallo, y aunque apenas coma, por usar mi dinero en ella, vale la pena, cuando quiero llorar, ella me ofrece reposo, aunque ya no me quede nada más que el bonito sonido de la chapa deshaciéndose de ella, ella me ayuda, ella, la botella.

David Galván

3 comentarios:

  1. Este microrrelato me parece muy interesante porque en las primeras frases nos podemos imaginar que se trata de una mujer de la cuál depende para todo y siente un profundo afecto, y quizás eso era lo que buscaba el autor, imaginarnos a alguien tan enloquecido por el alcohol que su mayor consuelo ha sido la adicción que siente por su botella, igual que un enamorado por su dama.

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  2. Este microrrelato demuestra que hay mucha gente que no puede saciar sus sentimientos y los expresa demostrando su amor a algo que los mata poco a poco

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  3. Esto refleja perfectamente la dependencia que llega a tener un alcohólico de la botella, hasta el punto de considerarla fiel e inseparable compañera.

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