domingo, 9 de noviembre de 2014

Un joven tan sólo con 13 años acude a un botellón, para hacerse el mayor delante de sus amigos, y, ¡cómo no!, delante de todos aquellos mayores que él que están reunidos allí en ese momento. El joven, no conforme con haber bebido esa noche, dada a su temprana edad, sigue acudiendo a botellones con bastante frecuencia. Pasado el tiempo, ya no se conforma con solo beber en los botellones sino que en mitad de la semana tiene que salir y volver a beber. Con tan solo 20 años, no puede pasar un día sin beber alcohol. Su familia y amigos se preocupan cada vez más porque se le ve mal y su estado de salud empieza a debilitarse, finalmente con 22 años muere, debido a que su hígado no a aguantado más presión de alcohol.

Laura Ruiz

2 comentarios:

  1. Cada vez los jovenes van a los botellones con menos edad . Solo por hacerse mas mayores y caer bien a los demas . Pero solo se estan fastidiando a ellos mismos porque un joven con esa edad no esta preparado para beber tanto pero ni a esa edad ni a ninguna .
    Zahira Habas

    ResponderEliminar
  2. Este microrelato nos enseña que a veces para hacernos guay delante de gentes nos pasamos y sin darnos cuenta nosotros mismos no lo sabemos lo que estamos haciendo

    ResponderEliminar