viernes, 7 de febrero de 2014

Traición

Tenía por seguro que no me correspondería, ella no se volvería tan loca por mí como yo lo hice por ella. Aun así ni quería ni podía olvidarla.
Sin su consentimiento yo me pasaba las horas a su lado, no me importaba su opinión, la necesitaba.
Nunca he creído en los flechazos que cuentan las películas y las novelas, yo confiaba en los amores que se forjan a fuego lento. Este no me pareció del todo así al principio, pero no me importó. Así no me quemaría, pensé olvidando que el hielo puede quemar tanto o más que el propio fuego.
El comienzo era frio, y me resultó sorprendente la temperatura que iba alcanzando a medida iba conociéndola, los grados se incrementaban conforme más cerca de ella estaba. No me preocupaba por la risa que un día me importó, no me preocupaba por las lágrimas que me amargaron el sabor de su boca. De nuevo la temperatura.
De todos los sentimientos, el más grande resultó ser el más doloroso. Desilusión, decepción y sobre todo traición, me había traicionado.
Creí que nunca lo haría, y mi botella de Ginebra acabó por quemarme.


María Pérez

3 comentarios:

  1. Este microrrelato me parece muy especial ya que es verdad que podemos llegar a perder la cabeza por una botella de alcohol: peleas en las puertas de los pubs, peleas en el propio pub, emborracharnos y no saber qué estamos haciendo por un trago de algo que sabe mal si lo tomas solo. Luego empiezas a reírte, comienzas a sudar, quieres quitarte ropa, te sientes mal... Un trago de alcohol que nos puede hacer pasar un mal trago.

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  2. Me gusta este microrrelato que se sale de la temática de la mayoría. Si juegas con fuego al final te quemas, en cuestión de sentimientos no se puede jugar ni forzar. Al igual que con el alcohol pienso que es mejor retirarse antes de resultar dañado y el daño se haga más grave y llegue al punto de no tener remedio.

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  3. Desde el principio llama mucho la atención. Me encanta como relaciona el amor con el alcohol. Te hace darte cuenta, al final, de lo dura que es esta relación y que al final no lleva a ningún lado. Muy bien explicado el proceso de cómo al principio te crees que todo lo controlas y todo va bien hasta que te das cuenta de la traición del alcohol.
    Enhorabuena.

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