Aún recuerdo como empezó todo, aquellos niños inocentes que
un día comenzaron a jugar y compraron una botella de alcohol para divertirse,
Aquellos muchachos que juntos empezaron a beber todos los fines de semana, y
que poco a poco se acostumbraron a tomar los días en el parque. Mientras
borrachos hacían carreras con los coches, sí, eran aquellos jóvenes de los
cuales ahora solo quedan sus cuerpos sin vida tendidos en la carretera,
esperando a que el juego termine.
Ismael Barrena
Me gusta el microrrelato, porque hay personas que tienen mucha prisa por probar e ingerir este tipo de bebidas, sin ser consciente de las consecuencias que éstas pueden traer, como pueden ser perder a tu familia o incluso tu vida.
ResponderEliminarAzahara Corraliza