Todo
sucedió un día de caluroso de verano, la playa y el sol propiciaba
un día estupendo.
Raquel
y Magdalena eran dos hermanas jóvenes y divertidas, estuvieron toda
la mañana en la playa con sus amigos y por la noche volvieron a
quedar con ellas, porque era el día de la patrona del pueblo. Iba a
ver una gran fiesta en la playa, pasearían a la patrona en los
barcos en una procesión muy bonita como todos los años, después la
gente más joven como era sábado, se quedarían en la playa hasta
altas horas de la noche.
Magdalena
era la hermana pequeña y no controló la cantidad de alcohol que
ingirió esa noche, su hermana le reñía, pero entre más bebía
más quería; hasta que se desmayó y no volvió en si.
Llamaron
a protección civil que en esos momentos se encontraban en la playa,
le pusieron una inyección y se la llevaron al hospital más cercano.
Magdalena había entrado en coma, por culpa del alcohol ingerido;
pasó muy mala noche, pero por la mañana despertó y se fue
recuperando poco a poco. Aquella noche quedó en un malo recuerdo
para las hermanas.
Miriam Ruiz
Me a gustado este microrrelato porque ayuda a saber lo que puede provocar el alcohol
ResponderEliminarMe gusta cuando Raquel ayuda a su hermana por culpa del alcohol.
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