Después de
una noche de fiesta te despiertas por la mañana, miles de preguntas vienen a ti:
¿Qué hice anoche? Mi respuesta es: no me acuerdo de lo que hice. ¿Haría algo mal?
No lo sé. ¿Le habré fallado a mi chica? No me acuerdo de con quién estuve. ¿Llegué
tarde a casa? No lo sé, solo sé que me trajeron a casa y yo entré. Esto es un
sinfín de preguntas, sin tener ninguna respuesta. Me pregunto ¿Por qué?
Me doy
cuenta, lo he hecho mal, no llego a ningún sitio bebiendo alcohol, lo
único que me hace esto es sentirme tan mal como hoy, con tantas preguntas sin
respuestas, con ese "cocimiento de cabeza", que nadie puede quitármelo. Entonces
pienso en proponerme algo, veo que esto no ha sido sano para mí, ni para las
personas que están a mí alrededor. Puedo salir de fiesta y saber lo que hago,
llegar a casa, si tengo preguntas... quiero saber contestármelas, saber que siendo así no
le haré daño a mi chica.
¡ME DOY CUENTA QUE EL ALCOHOL SIMPLEMENTE ES UNA
ADICCIÓN QUE TE QUITA VIDA!
No hay comentarios:
Publicar un comentario